
Mame Diarra Sonko,
Senegal
El sector agrícola es uno de los pilares de la economía senegalesa, con una contribución del 15,2% al PIB, según el Banco Mundial. A pesar de que más del 60% de la población rural vive de cultivar la tierra, el 21% de la comida que se consume en Senegal proviene del exterior.
Desde la llegada del proyecto, todo ha cambiado para nosotras. Nos han alambrado 4 hectáreas con vallas y proporcionado todo el material necesario. Al principio, regábamos con agua de lluvia, pero ahora, con el sistema de riego con bombas y paneles solares, el trabajo en el perímetro es mucho más sencillo.
Este proyecto nos ha proporcionado 3 pozos y 9 estanques, por lo que ahora, si necesitamos agua, podemos ir y tomarla para regar. Esto ha transformado nuestras vidas y nuestras prácticas agrícolas, especialmente a partir de la formación que hemos recibido.
Desarrollo rural sostenible liderado por mujeres y jóvenes
Nuestro recorrido en el país
Paz y Desarrollo ha concentrado su trabajo en el Sur de Senegal, en la Región de la Casamance. Entre los años 2001 y 2006, con financiación descentralizada, trabajó en los departamentos de Oussouye, Sedhiou, Kolda y Ziguinchor, centrando sus esfuerzos en la mejora de la producción agrícola y su comercialización en comunidades rurales.
En 2007, cuando Paz y Desarrollo ya había reorientado sus objetivos estratégicos, priorizando la igualdad de género como medio y fin para un desarrollo humano sostenible y equitativo, inició la implementación de estrategias regionales en Guinea Bissau, Mali, Mauritania y Senegal. Su finalidad fue mejorar las oportunidades de las mujeres en los ámbitos de educación y salud, así como el fortalecimiento de organizaciones de mujeres y sus intervenciones en la defensa de la equidad de género.
En la Región de Ziguinchor, las acciones prioritarias de PyD se han focalizado en la seguridad alimentaria de mujeres campesinas cabeceras de familia, y en actividades orientadas al incremento de su autonomía económica a través del apoyo a cadenas de valor lideradas por grupos de promoción femeninos en la transformación de productos agrícolas para su comercialización.
Todas estas acciones favorecen la disminución de vulnerabilidades en mujeres de familias rurales que enfrentan barreras de acceso a sus derechos económicos (control de recursos y beneficios de la producción) y sociales básicos (inseguridad alimentaria).
Desde 2019 hasta la actualidad, en el marco del plan estratégico 2020-2024 y las nuevas líneas estratégicas trazadas para la planificación 2025-2029, las acciones implementadas por PyD en la región de Ziguinchor, junto a sus socios locales ANCAR y COSEF, están contribuyendo a la construcción participativa de un modelo de desarrollo rural sostenible liderado por mujeres y jóvenes. Este modelo se basa en la aplicación territorial de políticas públicas para el acceso y protección de sus derechos.
La apuesta por la sostenibilidad de la vida se refleja en la creación de medios de vida resilientes al cambio climático y en la promoción de la dignidad, generando capacidades y visibilizando a mujeres y jóvenes para el acceso efectivo a sus derechos.

Cómo lo hacemos
Proyectos en Senegal
